Un estudio paleoclimático publicado en Nature pone en duda la capacidad predictiva de los modelos climáticos
Según el estudio publicado en Nature "Northern Hemisphere hydroclimate variability over the past twelve centuries" (Fredrik Charpentier y otros), el hemisferio norte ha experimentado variaciones mucho más drásticas en las precipitaciones durante los pasados 12 siglos que en el siglo XX. Los investigadores han encontrado que los modelos climáticos sobreestimaban el incremento en los extremos de sequía y precipitación durante el siglo XX.
Variaciones de los episodios de sequía y precipitación en el hemisferio norte, desde el siglo IX hasta el XX, han sido objeto de estudio. Los investigadores reconstruyeron cambios en la disponibilidad de agua analizando estadísticamente la mayor o menor presencia de la precipitación. Para ello recopilaron cientos de registros indirectos de precipitación en todo el hemisferio norte como anillos de árboles, espeleotemas, sedimentos en lagos y registros históricos.
Según Fedrik Charpentier Ljungqvist, historiador e investigador del clima en la Universidad de Estocolmo: "Hemos comparado cambios en la precipitación en varias partes de Europa, Asia y Norteamérica para los pasados 12 siglos. Las anomalías de precipitación han sido más y han cubierto áreas más grandes en algunos siglos anteriores que en el propio siglo XX".
Para investigar los nexos entre variaciones de temperatura y de precipitación, los investigadores compararon ésta con una reconstrucción de la temperatura hecha previamente por el equipo. Concluyeron que la correlación entre ambas variables era solo clara en unas pocas específicas regiones. Por ejemplo durante los años cálidos del siglo XII y del XX, y del frío siglo XV se produjo sequía en muchas zonas del hemisferio norte.
Por otra parte, han descubierto que anomalías hidroclimáticas de mayor intensidad y duración que las del reciente siglo XX han ocurrido en el milenio anterior. Por ejemplo, "megasequías" durante la Edad Media en el oeste de Estados Unidos, o ausencia de lluvias monzónicas en Asia entre los siglos XV y XIX. Esto sugiere claramente que el llamado período instrumental, básicamente los últimos 100-150 años, es demasiado corto para incluir el rango completo de comportamiento hidroclimático.
Se suponía que el calentamiento global debía influir fuertemente en el ciclo hidrológico influyendo en los patrones de comportamiento del sistema climático. La simulación por modelos climáticos, que es el método por el que se pretende predecir con precisión el comportamiento del clima futuro, sugiere una intensificación del contraste húmedo/seco y una expansión de las zonas áridas. Hablando muy en general, las zonas secas se harían más secas y las húmedas más húmedas. Por lo tanto, ese hecho debería reflejarse para el siglo XX en los datos indirectos (proxy) utilizados en el estudio. Pero no ocurre así.
El estudio pone en perspectiva la variación de precipitación a muy largo plazo ya que las actuales medidas abarcan un período aún muy corto para decirnos si los cambios actuales caen fuera del rango de la variabilidad climática. También son cortas para comprobar si los modelos climáticos son capaces de predecir que regiones serán más secas o húmedas por el cambio climático.
En resumen, se deduce del estudio:
- En el pasado reciente (unos 1.000 años) las anomalías hidroclimáticas han sido mayores que las sufridas en el siglo XX, siglo muy favorable para los humanos.
- La mayor temperatura del siglo XX, ya sea por razones naturales o antropogénicas, no parece haber afectado sensiblemente al ciclo hidrológico, ya que no se reflejan variaciones significativas, como predicen los modelos.
- Los modelos climáticos han fracasado en reproducir el comportamiento hidroclimático del siglo XX, ya que no se ha producido la intensificación del ciclo hidrológico como apuntan.
- Queda mucho por hacer en cuanto a la precisión de los modelos con respecto a la variabilidad hidroclimática.
Por otra parte, una duda que no se plantea en la publicación pero que es evidente es que si las variables temperatura y precipitación están relacionadas con determinados patrones de comportamiento del sistema climático, como es posible que los modelos calculen bien la primera y mal la segunda. Según los autores:
"Los modelos simula razonablemente bien la precipitación preindustrial pero simulan para el siglo XX unas anomalías de humedad/sequía mucho más fuertes que las que refleja la reconstrucción. Esto no significa obligatoriamente que los mecanismos que gobiernan los cambios de precipitación estén equivocados. La explicación podría ser que el cambio global no es todavía lo suficientemente fuerte para desencadenar cambios en los patrones de precipitación".
¿Esta explicación forzada tiene carácter circular: Entonces ¿porqué durante los últimos 1000 años se han dado situaciones de sequía/humedad más intensas si las condiciones más extremas de calentamiento global que se suponen ahora no existían entonces?
FUENTE
http://www.nature.com/nature/journal/v532/n7597/full/nature17418.html
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